2008/08/04

Allá donde fueres, haz lo que vieres...o no



Una de las cosas que más me han impactado de Madrid son los taconazos gigantes que se "gastan" aquí para ir, incluso, a trabajar.
Esta costumbre choca frontalmente con mis zapatos planos con traje que ha causado más de una mirada de reproche en el ascensor de alguna "barbie" taconeada que sólo le ha faltado que me digan con aire mohín un "pero dónde vas así?".
Me preguntaba si la alta probabilidad de torcedura de tobillo, o el sorteo de irregularidades de la acera les genera un subidón de adrenalina cuál deporte de aventura.
Así que hoy he querido probar qué se siente yendo a trabajar sobre unos tacones de diez centímetros:
Los resultados:
. No paso precisamente desapercibida (1,75m + 0.1m= 1.85m), por lo que todo cuanto repartidor de periódicos, "señora" de nacionalidad dudosa pidiendo, etc, me ve a varios kilómetros de distancia.
- El ruido de los tacones contra el suelo empeora el grado de contaminación acústica de la ciudad.
- El "sorteo" de imperfecciones en la acera implica caminar como Jack Nicholson en Mejor Imposible.
- Perder el autobús es un hecho.
- El asiento del autobús es demasiado bajo y además de quedarme las rodillas en las orejas para levantarme necesito una grúa.
- El trayecto cruzando el "osea-parque" que hay frente al "osea-edificio" en el que trabajo es peor que una sesión de trekking avanzado.
- Todo ello supone llegar más de 15 minutos más tarde sobre lo previsto.
- Ves la calva hasta aquellos que, a pie de calle, no se les nota.
- Se siente una como una bailaora cada vez que hay que pasar por un pasillo de suelo de mármol, tacatá, tacatá.
- Cualquier recorrido que se desvíe del casa-trabajo, trabajo-casa es inviable.
- Me muero por llegar a casa y ponerme las zapatillas.

Concusión: ya sé lo que se siente y definitivamente, en este aspecto donde fueres, no hagas lo que vieres. Si están locas, allá ellas.

8 comentarios:

SIL dijo...

El truco está en no coger transporte público: sales de casa entaconada, bajas al parking, coges el coche, al parking de la oficina, y la vuelta al revés.

Los taconazos no están hechos para caminar...

la gata dijo...

Pues lo tengo complicado pq:
a) no tengo carnet de cinducir
b) ni coche
c) ni parking en casa
d) ni en el trabajo

Aun asi vi que las barbies llegan en bus o metro como yo. El colmo el otro día sin ir más lejos. La chica iba mega conjuntada que te mueres y unos tacones imposibles. La pobre casi no podía caminar. Cruzando el parque resoplaba. La adelanté, aunque me quedé con ganas de saber cómo llegaba.

Estoy de purando mi técnica: zapatos planos en el bolso (como las americanas), en caso que me ponga tacones.

SIL dijo...

Yo no le acabo de ver la gracia a ponerse así de megaguay para meterse en el metro a pasar calor, de pie, etc... O todo o nada!! No se puede ir de superpija para luego ir en la línea 6 como en una lata de sardinas!

Los zapatos planos en el bolso son una idea genial!! Lo mejor es ser práctica, dí que sí!

Mofi dijo...

siempre vengo en zapatos cómodos y luego, mientras enciendo el ordenador, me pongo unos tacos mil...que para ir hasta la máquina de café o la fotocopiadora, que es todo el ejercicio que hago durante las horas de trabajo, son más que soportables.
Lo único malo es que los bajos de los pantalones se ensucian un poco cuando vas desde csa con zapatos bajos. Otra cosa mala, es que la probabilidad de encontrarte alguien de camino al tarbajo es proporcional a la "comodidad" de tus zapatos (más feos, más gente).

ah, por cierto, hola! soy nueva por aquí...

la gata dijo...

Veo que este post ha dado para un debate digno de Sexo en NY, jajajaj.
Bienvenida "mofi".

Anónimo dijo...

Jajaja...pues sí parece uno de esos debates de las cartas de los lectores de La Vanguardia.

Yo soy práctica. Si hay visitas de clientes tacones, sino plana.

Anónimo dijo...

Pues yo ya paso la verdad,q me miran pq levo zapatos planos q miren..y lo agusto q voy caminando...sin miedo a tropezar!!!

la gata dijo...

Después de ese día reconozco que he repetido, pero como plana nada.