Desde que soy adulta la Navidad ya no es lo mismo. Estos días, con las luces y el espíritu navideño por todas partes, los sentimientos están a flor de piel. La alegría y la tristeza se acentúan y los recuerdos, buenos y malos vuelven como el fantasma de las navidades pasadas de Mr. Scrooge. Hay años en los que las cosas han ido mejor y otras en que se han complicado especialmente en estas fechas. Este año, es de los segundos: Un futuro profesional incierto en el que la motivación se ha esfumado, problemas familiares que separan, que dejan el amargo sabor de la pérdida,...
Si durante el año se hace difícil hacerse la fuerte y tirar para adelante, con tanto villancico, Papá Noel y anuncio de cava aún se hace más complicado. Lo cierto es que es agotador tener que ser siempre fuerte. Hay días en que apetece poder aparcar la armadura y la espada y dejar que la “doncella” se permita el lujo de ser débil y desvalida. Pero eso tampoco es fácil. De hecho, eso es peligroso. Una vez bajada la guardia puede costar demasiado volverla a subir.
Así que ante posibles bajones, lo mejor es paliarlos. Cómo? Tal vez una tarde de compras, una buena dosis de chocolate, una película romanticona...
Hoy ha tocado una de esas sesiones “anti-melancolía”: tarde entre tiendas, un poco de Sacher para merendar y “Baila conmigo” para acabar el día. Sí, sé que quizás no es la mejor manera de afrontar los problemas pero, a veces sienta tan marcarse unos pasos en Chayanne...
Y mientras escribo estas palabras ya es otro día, ya es mañana, ya vuelve tocar ser fuerte y plantarle cara al día, al trabajo, a la gente y a la vida.
Si durante el año se hace difícil hacerse la fuerte y tirar para adelante, con tanto villancico, Papá Noel y anuncio de cava aún se hace más complicado. Lo cierto es que es agotador tener que ser siempre fuerte. Hay días en que apetece poder aparcar la armadura y la espada y dejar que la “doncella” se permita el lujo de ser débil y desvalida. Pero eso tampoco es fácil. De hecho, eso es peligroso. Una vez bajada la guardia puede costar demasiado volverla a subir.
Así que ante posibles bajones, lo mejor es paliarlos. Cómo? Tal vez una tarde de compras, una buena dosis de chocolate, una película romanticona...
Hoy ha tocado una de esas sesiones “anti-melancolía”: tarde entre tiendas, un poco de Sacher para merendar y “Baila conmigo” para acabar el día. Sí, sé que quizás no es la mejor manera de afrontar los problemas pero, a veces sienta tan marcarse unos pasos en Chayanne...
Y mientras escribo estas palabras ya es otro día, ya es mañana, ya vuelve tocar ser fuerte y plantarle cara al día, al trabajo, a la gente y a la vida.
7 comentarios:
Si hay años especialmente intensos. No siempre tienes que ser fuerte, no siempre tienes que ir con armadura, capa y espada. Y no te preocupes en exceso, todo cambia, nada permanece.
Eso es cierto Gata. No hay mal que dure mucho tiempo. Cuando lleguen tiempos mejores los disfrutarás el doble y recordarás los malos momentos como algo constructivo que te ayudará a afrontar nuevos retos. Eres más fuerte de lo que crees. No hace falta que seas tan dura contigo misma e ir siempre a la batalla.
Muchos besos y márcate un buen bailoteo Ricky Zinc....
Murphy's law: Si algo va mal puede ir peor.
Sí, no tengo derecho a quejarme pero estoy tan cansada...
Ojalá puediera permitirme el lujo de caer, aunque fuera un rato.
quién es Ricky Zinc?
Ricky de Ricky Martin y Zinc por la Gata de Zinc....
Una ida de olla de las mías....las neuronas me van rápido.
No hay que estar tan pendiente de la armadura, chavalita, ni nadie te pide que tengas que ser o parecer fuerte siempre (de hecho, deberías evitar utilizar en la medida de lo posible el "siempre", el "nunca" y cosas así), ni preocuparse de bajar la guardia (niña, que no estás en el ejército, deja la lógica miliar para otros)... pero, sobretodo, no deberías de ver tantas películas romanticonas de las que ves... al final os lo acabáis creyendo todo.
ok Hack. La guardi siempre alta, ya sabes mi pasado esgrimista (eso no deberia decirlo, no?). Pero un minuto de debilidad en un mundo plagado de trepas puede costar caro. Q hay peña "nacida pa putear".
Cierto, el cine hace daño pq cuentan bonitas mentiras y luego la realidad es otra. Si me tuviera que consolar con la realidad que me rodea acabaría dándole a la botella. Así que déjame que me olvide de todo con la sonrisa de Chayanne.
ok Hack. La guardi siempre alta, ya sabes mi pasado esgrimista (eso no deberia decirlo, no?). Pero un minuto de debilidad en un mundo plagado de trepas puede costar caro. Q hay peña "nacida pa putear".
Cierto, el cine hace daño pq cuentan bonitas mentiras y luego la realidad es otra. Si me tuviera que consolar con la realidad que me rodea acabaría dándole a la botella. Así que déjame que me olvide de todo con la sonrisa de Chayanne.
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