Entre tanto mal rollo navideño se ha colado más de un sueño significativo que “fa pensar”. El de esta noche no ha sido de ésos. Como llevo varios posts autocompasivos me ha parecido que un poquito de alegría y buen rollo valía la pena (me da la impresión que ya cansa tanto buá, buá y, como siga así perderé lectores de post y no es plan, todo sea por la audiencia bloggera).
Esta noche pasada soñé que iba a patinar a la pista de hielo Skating de nuevo. Me acordaba bastante para haber pasado casi veinte años desde la última vez que me calcé unos patines. Notaba ese olor a hielo, el frío, oía el ruido de las cuchillas sobre el hielo, zas, zas. Sonaban canciones variadas, había gente que sabía y otros que nos aguantábamos con más o menos soltura. No recuerdo con quién iba pero me lo estaba pasando bien y sonreía.
Me he despertado con esa sonrisa. Mientras me desperezaba recordaba cuando iba casi cada sábado. Debía tener once o doce años. Quedábamos unas cuantas niñas del colegio en la puerta de la pista. Era la época en que uno de los niños pre-adolescentes que hacía hockey de Maristas se dedicaba a hacer el machito y nosotras reíamos como memas. . Nos pasábamos la mañana patinando y riendo, apurando hasta el último minuto. Luego tocaba correr para llegar a casa antes de las dos y media para comer. Tras el verano dejamos de ir a patinar. Las hormonas de la mayoría decidieron que aquello era de niñas pequeñas y no volvimos a ir. Desde entonces, no he vuelto a ponerme unos patines. Tampoco mantengo contacto con mis antiguas compañeras patinadoras.
Supongo que el subconsciente me ha jugado una mala pasada y que el bombardeo de películas navideñas y de anuncios de pistas de hielo montadas en las plazas y centros comerciales ha desempolvado aquel recuerdo.
Así que ahora tengo el gusanillo. Me apetecería muchísimo ir un día a aquella pista y patinar de nuevo. Alguien se apunta? Alguien quiere volver a ser niñ@ conmigo?
Esta noche pasada soñé que iba a patinar a la pista de hielo Skating de nuevo. Me acordaba bastante para haber pasado casi veinte años desde la última vez que me calcé unos patines. Notaba ese olor a hielo, el frío, oía el ruido de las cuchillas sobre el hielo, zas, zas. Sonaban canciones variadas, había gente que sabía y otros que nos aguantábamos con más o menos soltura. No recuerdo con quién iba pero me lo estaba pasando bien y sonreía.
Me he despertado con esa sonrisa. Mientras me desperezaba recordaba cuando iba casi cada sábado. Debía tener once o doce años. Quedábamos unas cuantas niñas del colegio en la puerta de la pista. Era la época en que uno de los niños pre-adolescentes que hacía hockey de Maristas se dedicaba a hacer el machito y nosotras reíamos como memas. . Nos pasábamos la mañana patinando y riendo, apurando hasta el último minuto. Luego tocaba correr para llegar a casa antes de las dos y media para comer. Tras el verano dejamos de ir a patinar. Las hormonas de la mayoría decidieron que aquello era de niñas pequeñas y no volvimos a ir. Desde entonces, no he vuelto a ponerme unos patines. Tampoco mantengo contacto con mis antiguas compañeras patinadoras.
Supongo que el subconsciente me ha jugado una mala pasada y que el bombardeo de películas navideñas y de anuncios de pistas de hielo montadas en las plazas y centros comerciales ha desempolvado aquel recuerdo.
Así que ahora tengo el gusanillo. Me apetecería muchísimo ir un día a aquella pista y patinar de nuevo. Alguien se apunta? Alguien quiere volver a ser niñ@ conmigo?
6 comentarios:
Y no se puede jugar a papas y mamas o a médicos para volver a ser niños? No hace tanto daño que un costalazo en el skating.
La última y única vez que fui debería tener 13-14 años... no he repetido y no sé si lo volveré a hacer, pero si me puedo librar no voy.
Eso sí, después d varias ostias y q los niños listos se ríesen, ver a un padre abnegado, devoto de sus hijas, aguantar el equilibrio para no irse al suelo desde la grada... impagable.
Nunca jugué a papaás y mamás ni a médicos de pequeña. Todo éramos niñas y no había interés.
Ok, pues nada...a ver si alguien se anima...
Ufff... el Skating... que gran recuerdo. Yola primera y única vez que he ido, "estrené" a lo grande la pista de hielo. Nunca había patinado (ni sobre hielo, ni sobre asfalto), y no lo había hecho, a pesar de tener patines, porque NUNCA he tenido equilibrio. Y si mezclas, una superficie resbaladiza, con una personita (tenía 14-15 añitos) sin equilibrio, ¿qué tenemos?.. ¡¡una fractura de la muñeca izquierda!! como consecuencia de una mega caída ridícula a más no poder. Salí con la muñeca escayolada y mi ego por los suelos.
No... sintiéndolo, yo no puedo apuntarme... hay traumas que aún perduran.. sniff, sniff.
Otro día os cuento porqué no quiero ir a esquiar... (un árbol y un trineo tienen la culpa de ello).
Jooo...pues vaya...:-(
De verdad nadie se apunta? Tendré que ir sola, snif, snif.
Emperatriz lo de esquiar lo comparto. Lo mío fue árbol y HIJOPUTA snowboarder.
A ver....yo no he patinado en mi vida, pero mi churri está hecho un artista del patinaje en linea....Si queieres ir, nos dices el día y a ver si te podemos acompañar...creo que ya sé de quien os vais a reir....
Curioso sueño.Creo que es la Navidad, y que al final le daré la razón a Hack de man, que las películas románticas hacen mucho daño. Sólo he patinado una vez, (en Bélgica,) y muy mal, pero me reí mucho.En fin! a lo que iba, el otro día le comentaba a un amigo mis navidades ideales: Viena + nevada + chico sensible + paseo por puestecitos navideños+patinaje sobre hielo+cena romántica...Y mi amigo me suelta, ¿pero sabes patinar?-no-respondo- Y tampoco soporto el frío, jejejeje. Imaginaros la cara de mi amigo.Definitivamente las pelis hacen daño.
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