Diamonds are a girl's best friends

Hoy he vivido una experiencia curiosa: he acompañado a una de mis mejores amigas por las joyerías de Paseo de Gracia en busca del "anillo". Ahora leo esta frase y si no me conociera a mi misma pensaría que la que escribe es una pijorra asquerosa de esas de hablar nasal y nariz levantada que se mira el mundo desde la irrealidad de los superficiales. No es que me haya transformado, sigo siendo yo, no me he transformado en eso, todo tiene una explicación.
Mi amiga se casa y quería mirar anillos de prometida. No negaré que me ha hecho una ilusión enorme que quisiera que la acompañara.
Así que hemos entrado en algunas joyerías. Qué sensación. Yo no soy mucho de joyas ylo poco que tengo "bueno" siempre me lo han regalado así que las puertas que se abren cuando la que tienes detrás se cierra, las sillas forradas y la dependienta con botox hasta en las orejas me parecían de otro mundo. El colmo ha sido la incursión en la más "fashion" de todas ellas: música fashion, luces, café, bombones y gente charlando animadamente. No podía parar de pensar en aquella canción...sí, sí, la de "allí me colé y en tu fiesta me planté" porque la gente parecía conocerse, se saludaban y se sentaban en las mesas como si pasaran allí más de una tarde.
Cuando nos ha tocado turno una dependienta (sin botox, hemos tenido suerte) nos ha atendido muy amablemente. Entre una y otra joyería hemos visto "pedruscos" de todo tipo y de todo precio. El récord se lo lleva uno que valía su peso en diamante: 56100 euros. Lo que daría por ganar eso al año! Quién pudiera permitírselo!
Y entre tantos anillos no he podido más que rendirme ante los destellos de los diamantes, fascinantes, hipnóticos, bellos. Lástima que sean tan caros.
Mientras nos explicaban este modelo, este tipo de talla, esta calidad, paseaba la mirada por las vitrinas de la joyería y mi conciencia me ha empezado a susurrar al oído: Y esas piezas que llevan docenas de ellos, quién puede comprarlas? Cuántas familias vivirían estupendamente con una de ellas? En qué condiciones viven los que se dejan la piel en las minas de diamantes?
No he querido amargar el momento y me he dejado llevar por esos minutos de felicidad compartida. Hasta me he probado uno de ellos!
Sin duda ha sido una experiencia única.
Gracias armas esta tarde entre brillantes y centenares de fotos de vestidos de novia ha sido impagable. Miles y miles de gracias por compartir tu felicidad conmigo