2016/04/21

Duelo de protagonistas


A un par de días de Sant Jordi, ahora que vuelvo a escribir, mis dos grandes historias se disputan mi atención.
Como dos hijos pidiendo atención cada ambas historias me reclaman,"escríbeme, escríbeme", estirándome de la manga, llevándome hacia el ordenador. Mis personajes me miran con cara de pena, como perrillos abandonados y con cierta descripción si le dedico tiempo a "la otra historia".
Qué difícil es esto de ser escritora...
Me siento como una madre que no sabe a quién dar más amor, si a la historia que está más madura, que ha crecido conmigo o a la que me ha acompañado en mis genes y que ahora florece.
Sea como sea, es época de escritura y, eso, tras los años de sequía, ya es muchísimo.
Tendré que pensar una estrategia para dar amor a ambas historias o para decidir cuál aparco. Qué duro...quién ganará, el espía de la Segunda Guerra Mundial o la consultora?
Lo sabremos en próximas reflexiones de La Gata.

2016/04/17

Una de runner

Hace un par de años me fracturé la tibia de la manera más estúpida posible: no vi un minúsculo escalón de bajada. Fue nada más regresar a Barcelona así que mi inicio de nueva vida se vio pausado durante los cuatro largos meses que estuve de baja, casi sin salir a la calle.
Qué decir tiene que mi forma física, que no era una maravilla, sufrió un considerable revés ya que cuatro meses de reposo acaban con la musculatura de cualquiera.
Pero a golpe de fisio, entrenador personal y fuerza de voluntad, volví a correr un año después, con más ganas que antes, empezando a mirar tiempos, a cuidar la alimentación.
Hoy corría por la Carretera de las aguas, rodeada de runners, porque ahora los corredores ya no se llaman corredores, se llaman runners, y pensaba en lo lejos que estaba aquel primer día que intenté volver a correr, en que no pude recorrer más que un miserable kilómetro a “ritmo cochinero” y sacando los higadillos por la boca.
Mientras veía Barcelona a mis pies bajo un precioso día soleado, me he sentido feliz, quizás por las endorfinas generadas por el ejercicio, o por poder notar la brisa en mi cara mientras corría a un ritmo más decente o porque, simplemente, me sentía de nuevo yo a cada pisada.
Quizás yo también he pasado esa barrera del que va a correr de vez en cuando y pasa a ser “runner” (sea o no distinto a “corredor”). Sea como sea, vuelvo a disfrutar corriendo.

Tendré que pensarme un post sobre el fenómeno runner un día de éstos…

2016/04/06

Hazlo o no lo hagas, pero no lo intentes


Cómo cuesta ponerse a escribir tras un apagón de inspiración tan grande. Me cuesta encontrar qué decir, me cuesta escribir frases dignas, me cuesta enlazar más de 140 caracteres de un tweet y me cuesta no poner @ o # delante de alguna palabra.
Qué raro se me hace escribir algo que no sea un manual o cualquier otro documento en formato presentación con plantillas corporativas.
¿Dónde se quedó mi creatividad? Me niego a que mi mayor momento creativo sea organizar un workshop con temática StarWars, me niego a que lo que escriba tenga nombre de palabra en inglés o de sigla.
Así que, pese a las agujetas mentales que tengo por intentar escribir más de una frase seguida, he decidido empezar a “entrenar” en esto de escribir.
No hay excusa que valga. Como diría Yoda (de algo me ha de servir inspirarme en los Jedi a veces) “Hazlo o no lo hagas, pero no lo intentes”.

Si puedo quedarme un domingo cualquiera trabajando hasta casi las tres de la mañana, puedo robarle un rato al sueño para ir hacia mi sueño, para dedicárselo a mi pasión: escribir. Así que, ahí voy, a por unas cuantas frases para recuperar la forma.