Hacía meses que quería ir a ver The Fountain y siempre salía otro plan o cambio de última hora que me lo impedía por lo que empezaba a pensar que la vería ya en DVD. Pero finalmente la vi el sábado pasado. Y, coincidencia, o azar, o lo que fuera, lo cierto es que esa película hace unos meses no habría tenido el mismo significado que el sábado pasado. Y sé que las coincidencias, los azares estan mal vistos, que más de uno me creerá supersticiosa, pero, realmente, están ahí. Fuera como fuere, por esas casualidades, la película me encantó y la recomiendo.
No explicaré de qué va, ni comentaré la estética ni nada por si alguien que aún no la haya visto se quiere aventurar en un cine a hora golfa o bajársela de internet, pero dejo un link por si alguien le quiere dar un vistazo .
2 comentarios:
Las casualidades no existen, la viste en el momento justo, ni mas ni menos, sino no hubiera hecho falta verla, así de simple.
No hace mucho me explicaron una teoría de números transfinitos que desmontaba bastante mi más que arraigada propensión a las coincidencias, pero lo cierto es que sigo creyendo en ellas, porque me pasan demasiadas para ser pura casualidad (me podría tocar la lotería, ya puestos)
Publicar un comentario