2009/04/10

Sin título y no sé por qué...

Lo malo de ver tantas películas románticas es que la mente traicionera genera escenas espectaculares totalmente imposibles. Ella lo sabía.
Aún así, esperaba esa escena de película. Esperaba entrar en el edificio de apartamentos en el que vivía y encontrárselo a él, sentado junto a su puerta. Entonces se fundirían en un abrazo y todo sería maravilloso.
Pero entró en la portería, subió en el ascensor y junto a su puerta no había nadie, evidentemente.
Bajó la mirada y movió la cabeza de un lado a otro, como si así se dijera cómo podía ser tan tonta.
Mientras abría la puerta en su cabeza se repetía no suelen haber declaraciones increíbles, ni viajes exóticos, ni escenas de esas en que el chico recorre medio mundo para decir un "te quiero".
Quizás sí había flechazos de ensueño o momentos espectaculares pero, sin duda, en cuestión de finales, la realidad er a bastante más cruda y triste.
Cerró la puerta tras de sí y pensó en que gracias a esas películas vivía esas escenas que, en la vida real, estaban reservadas a unos pocos, muy pocos, y ella no era uno de esos elegidos.
Entonces recordó que una vez fue así y que, como en el cine, detrás de tantos "efectos especiales", sólo habían mentiras.
Tal vez la clave era encontrar a un guionista de películas románticas enloquecido, que viviera como en un film su vida.
Se sentó en el suelo y fue repasando su vidioteca romántica, a ver qué escena imposible tocaba aquella noche.

4 comentarios:

Unknown dijo...

¿Qué es la vida? Un frenesí.
¿Qué es la vida? Una ilusión,
una sombra, una ficción,
y el mayor bien es pequeño:
que toda la vida es sueño,
y los sueños, sueños son.

xnem dijo...

SIN TITULO es un bonito título.

el nom de la rosa dijo...

Pues el post es buen argumento para una película romántica de estas, con la Aniston o la Hathaway de prota...

la gata dijo...

Si, pero solo son sueños.

Graxias X

Lo tendré presente para futuros "exitos"